Doble parricidio: Mató a sus padres porque le exigieron título profesional

El asesino estudiaba ocho años Medicina y no brindaba cuentas a sus progenitores / CAPTURA PANTALLA

SEGURIDAD | 1 Jul 2019

VISOR BOLIVIA / Ángel Salazar.- En la zona sur de Cochabamba, un estudiante de Medicina, luego de una discusión familiar terminó con la vida de sus padres ahorcándolos con una goma. La hermana del parricida también fue agredida, pero sobrevivió y pudo escapar para denunciar el hecho ante la Policía.

La riña familiar se suscitó a raíz de que constantemente los padres le exigían a su hijo, de nombre Álvaro Rubén Fernández, la conclusión de sus estudios en la carrera de Medicina, la cual venía cursando hace ya más de ocho años.

En la discusión que se produjo cerca de las 11 de la noche del sábado, en la casa del señor Rubén Fernández Rojas de 60 años, ubicada en el Barrio Ferroviario del sur de la ciudad de Cochabamba, este, fue golpeado en la cabeza y posteriormente asfixiado con la goma de una llanta por su propio hijo.

Después de terminar con la vida del padre, el asesino citó vía telefónica a su señora madre Elena Salazar de 53 años, quien acudió al lugar en compañía de su hija. Al llegar al lugar fueron agredidas de la misma forma y creyendo que ambas mujeres perdieron la vida, el agresor abandonó el lugar, sin contar con que su hermana recuperaría el conocimiento minutos después y denunciaría el doble parricidio ante instancias policiales.

El director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen – FELCC, Cnel. Julio Cordero, informó que, luego de conocer del caso, se llevaron a cabo varios operativos para dar con el paradero del joven parricida, logrando resultados la tarde del domingo cuando este fue capturado escondido en la casa de su madre.

“El día de ayer en horas de la tarde fue aprehendido y puesto a disposición de las autoridades jurisdiccionales por los hechos suscitados en su domicilio”, refirió Cordero.

Según las primeras investigaciones, después de perpetrar el asesinato de sus padres el sujeto se dirigió al negocio familiar de venta de computadoras y aparatos electrónicos varios, y sustrajo una cantidad de dinero que aún no ha sido cuantificada.

El parricidio según la CPE y el Código Penal, conlleva la pena máxima de 30 años de cárcel sin derecho a indulto.

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