Denuncian privilegios para nuevos colonizadores de coca en los Yungas

Asentamientos de colonos que arribaron en la última década a la zona amarilla / ÁNGEL SALAZAR

SOCIEDAD | 5 Abr 2019

VISOR BOLIVIA / Ángel Salazar.- Asentamientos humanos nuevos en zonas despobladas con fines de producción alternativa, son utilizados como un pago de favores políticos y compra de lealtades, denunciaron dirigentes de la zona productora tradicional/ancestral de coca de La Asunta.

En entrevista con @VisorBolivia, la representante de mujeres de la Central La Asunta, Flora Natty, expresó que las nuevas comunidades asentadas en las zonas amarillas de producción de coca gozan de privilegios en comparación con el resto de agricultores, sin importar su antigüedad ni la ubicación que estos tengan en las zonas productoras que están divididas en tres: la zona verde que es la tradicional ancestral, la amarilla que corresponde a los nuevos sembradíos y la roja que hace referencia a los lugares donde está completamente prohibida la producción de coca.

Para la dirigente, estas nuevas comunidades asentadas cerca de La Asunta están en su totalidad conformadas por “militantes, dirigentes de la CSUTSB, afines al Gobierno”, indicó. Esta cualidad les valdría tener privilegios y ser prácticamente intocables ante la Fuerza de Tarea Conjunta – FTC.

“Nosotros como posición de la Central La Asunta, siempre hemos reclamado por las 50 comunidades verdes, porque hay un convenio con el Gobierno que tiene que respetarse, porque son cocas dentro el cordón originario ancestral”, refirió la dirigente, recalcando que las nuevas comunidades están dentro la zona amarilla, sin embargo, no son propensos a ningún trabajo de erradicación.

Por su parte, el dirigente Jesús Salazar indica que: “a todos los compañeros aliados al Gobierno dejan pues plantar coca en zonas rojas y amarillas. A los que no estamos con sus condiciones del Gobierno o no estamos apoyando y estamos en zona verde, originaria ancestral, igual nos sacan la coca”.

Según varias intervenciones de dirigentes durante el ampliado de unidad de la Central La Asunta desarrollado el fin de semana, la forma gubernamental de operar consiste en potenciar estas nuevas comunidades con la finalidad de conformar directivas paralelas afines al partido oficialista, con las cuales se firmarán convenios, creando de esta manera, entes paralelos a los ya establecidos.

El dirigente de los productores tradicionales Jesús Salazar en el ampliado de la pasada semana / ÁNGEL SALAZAR

Precisamente en el ampliado conjunto entre las Centrales Asunta y Litoral ya se trató el punto de dirigencias paralelas con afinidad al partido de Gobierno, determinando su completo desconocimiento y la posible expulsión de las personas que incurran en estas actividades, de ser necesario.

Según el artículo 384 de la Constitución Política de Estado, que hace referencia a la hoja de Coca. “el Estado protege a la coca originaria y ancestral como patrimonio cultural, recurso natural renovable de la biodiversidad de Bolivia y como factor de cohesión social; en su estado natural no es estupefaciente. La revalorización, producción, comercialización e industrialización se regirá mediante ley”.

Este artículo es el que las regiones productoras exigen se respete por tratarse de zonas ancestrales donde la producción es libre, por lo tanto, no aplica el catastro que se pretende realizar sobre este territorio.

Los productores de la hoja de coca tradicional de Yungas se encuentran en emergencia y desde la anterior semana van realizando bloqueos y vigilias ante la erradicación anunciada por el Ministerio de Gobierno. Se denunció también a este medio informativo el sobrevuelo periódico de helicópteros en la zona de La Asunta, situación que provoca temor en los pobladores, sobre todo niños.