Turquía y EEUU retoman relaciones y se advierte política expansiva en Oriente Medio

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se reúne con el presidente estadounidense, Joe Biden, al margen de la Cumbre de Líderes del G20 en Roma, Italia, el 31 de octubre de 2021 / AGENCIA ANADOLU

MUNDO | 5 Nov 2021

Al margen de la Cumbre G20, Erdogan y Biden abordaron la situación de la región mediante planes transfronterizos antiterroristas

AGENCIAS.- En el encuentro de la Cumbre de Líderes del G20, celebrado en Roma el domingo, se dio el encuentro entre los presidentes de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y de Estados Unidos, Joe Biden, que trató la adquisición de cazabombarderos F-16, que es algo visto como un plan de expansión que afectaría a Armenia y Georgia, entre otras naciones de Oriente Medio.

Al margen de la Cumbre G20, Erdogan y Biden, según reporte de Agencia Anadolu, abordaron la situación de la región mediante planes transfronterizos antiterroristas.

El líder turco aseguró que apoyará “siempre que sea necesario” las operaciones antiterroristas” y pidió a su par norteamericano no apoyar a esas organizaciones irregulares, en referencia al grupo YPG/PKK que opera en el norte de Siria.

Erdogan aseguró que también se discutió la adquisición de cazabombarderos F-16 y el compromiso de Washington de vender esos artefactos bélicos “en compensación por la expulsión de Turquía del programa del cazabombardero furtivo de quinta generación F-35”, hecho ocurrido en 2019, cuando Ankara adquirió de Rusia el sistema de defensa antiaérea que EEUU considera una amenaza para la OTAN.

Asimismo, se propuso “desarrollar lazos económicos” y temas de “cooperación en Afganistán, Siria, Libia y el Mediterráneo Oriental”.

Según Biden, no hubo ningún “enfoque negativo” en el encuentro

El profesor universitario y editor de la revista Russia in Global Affairs, Glenn Diesen, se refería a los anunciados planes de Turquía con EEUU y sobre la problemática que implica Siria.

“La complejidad de los conflictos sirios dificulta cualquier acuerdo entre Rusia y Turquía, pero los incentivos ya están en su lugar. Rusia desea el fin de la guerra contra Siria y la restauración del control territorial del gobierno. Mientras tanto, Turquía quiere que se resuelva el problema de los kurdos sirios y cree que la mejor manera de lograrlo es reafirmar la soberanía territorial siria. A nivel nacional, existen tensiones entre el público turco y la enorme comunidad de refugiados sirios en el país, que podrían resolverse poniendo fin al conflicto”, citó en el portal RT.

Y es que Turquía y Rusia habían logrado avances este año, incluida una reunión entre Erdogan y el presidente ruso Vladimir Putin, el mes pasado en Sochi, en el que se abordó un posible acuerdo de defensa.

“Una asociación militar de tal magnitud probablemente iría acompañada de un arreglo político del conflicto sirio. Mientras tanto, el inmenso alcance del arreglo militar y los posibles acuerdos políticos sobre Siria alejarían aún más a Turquía de Estados Unidos, y Washington probablemente se sienta obligado a imponer aún más sanciones a su "aliado" de la OTAN”, agregó Diesen.

En ese contexto, la posición de Turquía con EEUU resulta contradictoria y esto llama a los estados europeos a tomar medidas de disuasión a las políticas expansivas de Erdogan, que incluyen como objetivos a Armenia y Georigia.

“La Gran Asociación Euroasiática de Rusia se conceptualiza como un proyecto contrahegemónico. Rusia, en asociación con China, tiene como objetivo contrarrestar las ambiciones estadounidenses al permitir que las principales potencias de la Gran Eurasia diversifiquen su conectividad económica. Las ambiciones de Turquía de una política exterior independiente y diversificada se pueden acomodar fácilmente en la Gran Asociación Euroasiática, que puede reemplazar la política de bloque de la Guerra Fría, incluida la OTAN”, concluye.

//FUENTE: AGENCIA ANADOLU / RT//