Añez al TCP: “Son una vergüenza al pretender desconocer mi mandato” constitucional

Jeanine Áñez en enero de 2020 junto a las cabezas del TCP y TSJ en Sucre / TWITTER

POLÍTICA | 5 Oct 2021

Actuales magistrados emitieron en 2019 el comunicado sobre la DC 003/2001 y luego un Voto Aclaratorio en 2020 sobre la constitucionalidad de la transición

VISOR BOLIVIA / Redacción.- Cumplió seis meses de detención preventiva y le añadieron cinco más, que coinciden con otros seis que un juez le dictó cuando “dividió” el mismo proceso. Con esas acciones, la “justicia” pretende mantener encarcelada a Jeanine Áñez hasta febrero de 2022, sin contar los 75 casos de “corrupción” que el masismo dice tener en su contra.

Resignada en que estará encarcelada durante todo ese tiempo, la expresidenta boliviana escribió un “grafiti” en una de las paredes del penal de Miraflores, como mensaje a los administradores de justicia que hoy trabajan como operadores del masismo y su narrativa de “golpe” a Evo Morales.

“Jueces y fiscales al servicio del régimen de la dictadura de Arce arman procesos inventados y falsos. Me tienen en total indefensión. ¡Procesos políticos donde lo jurídico no tiene ningún valor! Sin justicia independiente no hay democracia”, señala el escrito.

Pero luego, la expresidenta añade otro párrafo dedicado a los magistrados del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) que hoy no se pronuncian sobre su caso, pese a haber avalado la sucesión presidencial de 2019 mediante un comunicado que citaba la Declaración Constitucional 003/2001, y luego de haber compartido estrados con Áñez en un acto oficial en 2020.

“TCP son una vergüenza al pretender desconocer mi mandato. ¿No recuerda el expresidente Franco? Me invitó a la inauguración del año constitucional el 2020 y ¡ahí estuve! Con todos los magistrados en el evento. ¡Resistiré!", escribió.

El acto descrito fue desarrollado el 3 de enero de 2020 en Sucre, cuando Áñez cuestionó el sometimiento del anterior TCP al régimen de Evo Morales y la polémica Sentencia Constitucional 084/2017 que declaró de aplicación preferente el artículo 23 del Pacto de San José de Costa Rica sobre el art. 168 de la Constitución Política del Estado (CPE), avaló la “reelección indefinida” e influyó en la crisis política y convulsión social que el país vivió los siguientes años.

Junto a Áñez estuvieron en testera el entonces presidente del TCP, Paul Franco, y la expresidenta del Tribunal Supremo de Justicia, María Cristina Díaz, con quien había estado en horas de la mañana en acto similar para inaugurar el año judicial 2020. En ese otro evento las acompañó, además, la expresidenta del Senado, Eva Copa.

Áñez asumió la Presidencia del Estado el 12 de noviembre de 2019, luego de la renuncia en cadena de Evo Morales, su segundo Alvaro Garcia y los presidentes de Senado y Diputados, Adriana Salvatierra y Víctor Borda, respectivamente, además de los vicepresidentes de ambas cámaras, Rubén Medinacelli y Susana Rivero.

Sobre la constitucionalidad de ese mandato el TCP remitió un comunicado que recordó la DC 003/2001, instrumento que en su tiempo generó jurisprudencia y validó la sucesión de Jorge Quiroga luego de la renuncia de Hugo Banzer quien padecía cáncer terminal.

El primer "grafiti" de Áñez en una pared del penal de Miraflores / RRSS

El considerando III.3 de esa Declaración Constitucional dispuso que la sucesión no requería ley alguna, como pedía el art. 91 de la anterior CPE, porque entendía que no debía haber vacío de poder en el Ejecutivo y, por tanto, Quiroga asumía “en el acto” el cargo.

“Que, consiguientemente, lo establecido en el art. 91 no es aplicable al caso concreto consultado, dado que aquí se está frente a una sucesión presidencial, originada en la vacancia de la Presidencia de la República, ocasionada por la renuncia del Jefe de Estado y no a un acto de proclamación, no requiriéndose de Ley ni de Resolución Congresal para que el Vicepresidente asuma la Presidencia de la República; si no que conforme al texto y sentido de la Constitución, el Vicepresidente asume ipso facto la Presidencia de la República hasta la finalización del período constitucional; cualquier entendimiento distinto podría atentar contra la inmediatez en la sucesión presidencial, prevista en el orden constitucional”.

El cuerpo normativo de esa DC del 31 de julio de 2001, con cinco considerandos, abarca toda la línea de sucesión constitucional que en la anterior Constitución incluso llegaba hasta el presidente de la Corte Suprema de Justicia. Precisamente, esa figura se dio en 2005 para la sucesión presidencial que recayó en Eduardo Rodríguez Veltzé.

Tras la crisis de 2019 Áñez se acogió al Reglamento de la Cámara Alta que establece que la Segunda Vicepresidencia, cargo que ella ejercía como senadora electa en 2015, asume la Presidencia del Senado en ausencia del titular y de la Primera Vicepresidencia, que correspondía a Salvatierra y Medinacelli, respectivamente, ambos renunciantes el 10 de noviembre de aquel año.

Como titular del Senado luego ejerció la Presidencia de la Asamblea Legislativa, tal como hizo Eva Copa durante su año de gestión, y en virtud al vacío de poder generado por la cúpula masista, se proclamó presidenta del Estado, como luego ratificó el TCP y la DC 003/2001 ipso facto.

Para el masismo, todo ese proceso de enmarcó en un “golpe de Estado” que además fue “planificado y perpetrado” por Áñez, al incumplir las “formalidades”. También se acusa de “cómplices” a todos los líderes de oposición, la Iglesia Católica, la Unión Europea (UE), los gobiernos de Argentina, Ecuador y Brasil, la Organización de Estados Americanos (OEA), “algunos” medios de comunicación, activistas de derechos humanos, plataformas ciudadanas y hasta se aludió a la hija mayor de Donald Trump, Ivanka Trump.

Finalmente, el actual TCP emitió un Voto Aclaratorio el 15 de enero de 2020, para establecer el carácter constitucional del gobierno de Áñez y la prórroga de mandato que se dio a todos los asambleístas y autoridades de los gobiernos subnacionales, en el que los magistrados reconocen que en 2019 “no se presentó ninguna situación de anormalidad constitucional”.

“Podrán quitar su salud con torturas y prisión injusta. Podrán hacer oídos sordos a sus derechos. Pero no podrán borrar el fraude ni que Jeanine Añez asumió como Presidenta Constitucional por la democracia. Gracias al Bloque de Unidad por no dejar solos a los presos políticos”, escribieron los allegados de la expresidenta vía Twitter, tras la difusión del “grafiti” en Miraflores.

El llamado bloque de unidad de cívicos, activistas, defensores de derechos humanos y clase política se reunió ayer durante la “cumbre de la democracia” en Santa Cruz, para pedir la liberación de Áñez y todos los presos políticos que el régimen de Arce llama “golpistas”.

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