INVESTIGADOR: 2.29% DEL PIB ANUAL BOLIVIANO PROVIENE DE LA ECONOMÍA DE LA COCA Y COCAÍNA

"Coca MAS cocaína: Economía de la droga, guerra falsa y pachamamismo”, se convierte en un libro revelador

Manuel Morales Álvarez en al presentación de su libro el pasado 21 de noviembre / FACEBOOK

SOCIEDAD | 3 Dic 2018

VISOR BOLIVIA / Redacción central.- El investigador Manuel Morales Álvarez revela datos sobre la economía subterránea del país en su libro “Coca MAS cocaína: Economía de la droga, guerra falsa y pachamamismo”, cuya difusión se va extendiendo en los departamentos de Bolivia para demostrar que el 2.29% del Producto Interno Bruto - PIB proviene de esa comercialización.

Morales Álvarez presentó su nuevo trabajo en La Paz hace dos semanas en la Universidad Mayor de San Andrés - UMSA, pero ya ha llegado hasta Cochabamba, Oruro y prevé ir al oriente del país, según comentó en entrevista con radio Fides.

Un dato sorprendente es aquel del 2.29% del PIB que se maneja en el comercio de la coca y el tráfico de cocaína cada año, que pareciera poco como porcentaje, pero que en 12 años del régimen de Evo Morales supera un cuarto de la economía nacional.

El PIB anual, reportado al cierre de 2017, era de 37 mil millones de dólares; por tanto, el 2.29% que expresa el investigador bordearía los 850 millones de dólares en esta suerte de “economía negra”, como llama Morales Álvarez.

“Es una economía escondida, negra, informal, que ahora los bolivianos con este libro tienen la posibilidad de conocer”, dijo el investigador, pidiendo al Gobierno transparentar su lucha contra el narcotráfico para que la población pueda reflexionar sobre esta problemática.

Morales Álvarez califica su libro como un estudio de economía “en sencillo, pero con datos y análisis” que parte desde el incremento de cultivos de coca que aprobó el Movimiento Al socialismo - MAS para subir de 12 mil hectáreas, establecidas en la Ley 1.008 de Sustancias Controladas, a 22 mil hectáreas en la nueva Ley General de la Hoja de Coca.

De esas 22 mil ha, se distribuyó 14.300ha para la coca tradicional de La Paz y 7.700ha para la coca de Cochabamba, que no es considerada como cultivos ancestrales ni protegidos en la Constitución. Empero, la producción sobrepasó los límites hace un año, llegando a las 31.737ha cultivadas en 2017.

Uno de los diagramas del libro "Coca MAS cocaína" / MANUEL MORALES

En 12 años del régimen del MAS, el libro compara el precio del kilo de coca en 2006 que bordeaba los 5 dólares y hasta la fecha se incrementó hasta 9,40 dólares por kilo.

Del comercio de coca en Bolivia solo se tiene registro de la producción de los Yungas paceños, pero no así del comercio que sale del Chapare cochabambino del cual la Oficina de Naciones Unidas para la lucha contra el Crimen y el Delito - ONUDC, lanza datos estadísticos, pero sin mayor incidencia.

Recientes informes de ese organismo internacional confirman que 50% de la producción del Chapare no pasa por controles y solo 7% es registrado en el mercado legal de Sabaca. En términos generales solo el 37% de los cultivos está registrado como producción legal y el 63% entra en la categoría de la ilegalidad o “informalidad”.

“El Gobierno ha querido encubrir esta economía y la ha querido disimular”, con informaciones sobre operativos o incautaciones, pero sin llegar a revelar los datos del dinero que se mueve por debajo, agrega el investigador.

El autor asegura que la economía de la coca no es independiente, pues está muy ligada para su crecimiento a la actividad del narcotráfico que requiere ese insumo, por ejemplo en 350 kilos de la hoja para producir 1 kilo de clorhidrato de cocaína.

Para Morales Álvarez el Gobierno fomenta la producción del Chapare, en una nueva élite de campesinos que ya no son agricultores sino una clase empoderada. En contraste, la administración de Evo Morales no solo ataca a la producción de Yungas sino que pretende tomar la Asociación Departamental de Productores de Coca de La Paz - ADEPCOCA, y por ello se explica la persecución a su dirigente Franclin Gutiérrez.

El autor tiene el libro a la venta frente al monoblock de la UMSA, en la Plaza Bicentenario, pero también está presente en las diferentes ferias de libros y artesanías de El Prado, San Pedro, calle Comercio, entre otros.

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