MAS genera violencia e incurre en delitos y amedrentamientos

Testimonios sobre el accionar de los adeptos al MAS para defender el proceso de cambio derivó en violencia / RRSS

SOCIEDAD | 9 Nov 2019

VISOR BOLIVIA / Redacción central.- El partido oficialista MAS, del mandatario Evo Morales, cruzó este sábado la línea de la legalidad al haber cometido actos de violencia, vejación e incurrir en delitos como portación ilegal de explosivos e incitación a delinquir. Todo quedó registrado por los testigos de los hechos y difundido por las redes sociales.

La localidad de Vila Vila, carretera que conecta Oruro con La Paz, fue el escenario de la barbarie esta mañana, por las acciones de adeptos al MAS contra los manifestantes de la caravana de defensa de la democracia que venían en una docena de buses a reforzar las movilizaciones que pretenden ingresar a plaza Murillo.

La gente venía desde Chuquisaca y Potosí y habían cruzado el salar de Uyuni en medio de ambiente victorioso la noche del viernes. Se preveía la llegada a Caracollo en la mañana y luego el arribo a la ciudad de El Alto, tal vez con una parada este domingo. Sin embargo, las flotas llegaron a Vila Vila, donde fueron bloqueadas y comenzaron a romper los vidrios con piedras y detonaciones de dinamitas.

Uno de los testigos contó cómo se hacían explotar los cartuchos sin medir consecuencias, luego se tomó a 14 personas como rehenes para despojarles de sus pertenencias, desnudarles e incluso hacerles “confesar” haber recibido entre 100 y 500 dólares del líder cívico Luis Fernando Camacho. La peor parte se la llevaron las mujeres pues también se denunció vejaciones que entrarían en la figura penal de abuso sexual.

Al menos 37 heridos fueron trasladados a los hospitales Oruro, Corea y la posta médica de Vila Vila, según medios locales.

Ya en la tarde, luego de la convocatoria del mandatario Evo Morales para que sus bases “defiendan el proceso de cambio” de lo que él llama un “golpe de Estado” en curso, los pobladores del trópico de Cochabamba salieron en manifestación de unas 50 personas, todas provistas con banderas del MAS, palos, machetes e incluso artefactos que emulan bazucas y granadas.

Los pobladores de Ivirgarzama y Chimoré, entre otros, fueron a manifestar su apoyo a Morales, quien se dirigió a su bastión político y social en la tarde, pero también con amenazas de llegar hasta Cercado para combatir a los manifestantes de defensa de la democracia que partirán este domingo por la mañana desde Santa Cruz con destino a la sede de gobierno.

Ya en la noche, la ciudad de El Alto fue tomada por los grupos masistas, concentrados en el peaje de la autopista de la Ceja.

Al grito de “Ahora sí, guerra civil”, un grupo de militantes y seguidores de Morales, repitieron que no dejarán bajar a nadie hasta plaza Murillo y ratificaron el plazo de 48 horas que dio la FEJUVE aliada al MAS, para que los cívicos Camacho, Marco Pumari, el rector de la UMSA, Waldo Albarracín y el expresidente Carlos Mesa, “salgan de La Paz”, por ser, según su criterio, “racistas” y “golpistas”.

Al promediar las 22 horas, otro grupo del MAS pasó por Ciudad Satélite, barrio intermedio entre la hoyada y la Ceja, provocando la alarma vecinal porque se pensaba en un ataque al Regimiento Policial 3 que desde anoche cumple con la medida del repliegue o motín, apoyando la defensa de la democracia.

Las huestes oficialistas provocaron que los vecinos salgan a hacer vigilia en las calles con fogatas y cercos, y el comercio, como el conocido centro Hipermaxi tuvo que reforzar su ingreso con calaminas ante un posible ataque. De su paso quedaron afectadas las antenas de transmisión de los canales Unitel y TVU.

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