Quelca renuncia como Ministro de Educación y junto a su barra arremete contra la prensa libre

Quelca subió al cargo como parte de la cuota de poder del PC que tomó las direcciones de educación desde 2009 / ERBOL

POLÍTICA | 12 Nov 2021

Viceministra denunció al antiguo miembro del Partido Comunista, luego de hacerse públicos los chats de WhatsApp que éste intercambiaba con su director técnico

VISOR BOLIVIA / Redacción.- El profesor Adrián Quelca no es más ministro de Educación. Tras haber quedado imputado por la Fiscalía en el caso de presunto incumplimiento de deberes, por haber favorecido y manipulado la distribución de cargos en el sistema educativo nacional, Quelca presentó su renuncia no sin antes ser vitoreado por sus adeptos que también lanzaban arengas contra la prensa independiente.

“Hemos decidido a partir de este momento presentarle a nuestro presidente del Estado Plurinacional de Bolivia mi renuncia al cargo de Ministro de Educación. Lo hacemos con la certeza de que la verdad más temprano que tarde va a darnos la razón, porque tenemos la conciencia tranquila”, declaró Quelca en su última conferencia de prensa como ministro.

Ayer se conoció el pedido de la Fiscalía para que el ahora exfuncionario sea cautelado en arresto domiciliario por la investigación que también involucra a su exdirector de Institutos Técnicos y Tecnológicos, Agustín Tarifa, en uno de tres casos que ligan a ambos con actos irregulares desde el Ministerio de Educación.

En medio de aplausos y del discurso de apoyo a la gestión de Luis Arce, luego del periodo de lo que los masistas llaman “gobierno de facto”, Quelca apuntó contra la prensa por haber usado “calumnias” en su contra, además de haberse convertido en juez, fiscal y verdugo, como respondió a la consulta de un reportero.

La viceministra Aurea Balderrama fue quien denunció a Quelca, antiguo miembro del Partido Comunista, luego de hacerse públicos los chats de WhatsApp que intercambiaba el entonces alto funcionario con su director técnico.

En uno de esos chats se detalla cómo fueron manipuladas las pruebas de ascenso para cargos del sistema educativo. También se enviaban las pruebas para los adeptos al MAS y se vetaba de la competencia administrativa a otros profesionales, incluso llamándolos “pititas”, como acostumbra el masismo desde su regreso al poder.

Quelca se acogió a su derecho al silencio y cuando fue consultado por un reportero por qué no presentó descargos, el exministro reaccionó y citó la Constitución para aclarar que como denunciado debe defenderse de las pruebas y que se presume su inocencia en todo tiempo.

“Bravo ministro, eduque a la prensa”, dijo una de las funcionarias del Ministerio que lo acompañaba. Otro, con mayor violencia verbal, emitía solo disparates y llamaba “prensa vendida” a los reporteros que realizaban la cobertura.

El exviceministro de Educación, Christian Tejada, deploró la gestión de Quelca, que duró un año y un día al frente de esa cartera de Estado, y recordó que en la anterior gestión se dejó toda la base tecnológica para desarrollar el sistema de educación a distancia, además de convenios internacionales que quedaron frenados hasta la fecha.

“Ahora haremos seguimiento para ver qué determina la justicia, no duró ni año y no hizo nada por la educación del país (...) Reitero, sinónimo de masista es sinónimo de corrupción”, agregó en alusión a los casos que pesan sobre Quelca.

El abogado que sigue el caso, Abel Loma, informó que dentro del caso existen al menos 45 personas que fueron beneficiadas con cargos en esa compulsa manipulada.

"¿Qué pasará con las 45 autoridades elegidas via chanchullo? ¿Qué pasa con un chanchullero? Se va, dijo Loma.

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