OBLIGACIÓN Y SOBERANÍA, LAS PALABRAS CLAVE QUE ESPERA OÍR BOLIVIA EN LA HAYA

A partir de este 1 de octubre Bolivia tendrá certeza de lo que debe hacer para volver al mar / WEB

POLÍTICA | 30 Sep 2018

VISOR BOLIVIA / Redacción central.- Este lunes 1 de octubre a partir de las 9am, hora boliviana, la Corte Internacional de Justicia de La Haya definirá su fallo en la demanda marítima interpuesta por Bolivia contra Chile en la búsqueda de lograr una salida soberana a costas del océano Pacífico. Dos palabras son la clave para entender el diferendo centenario entre ambos países.

Más allá de toda pugna interna, este lunes todo el país estará atento a la determinación de los 14 jueces del tribunal internacional dependiente de la Organización de Naciones Unidas – ONU con sede en el Reino de los Países Bajos, que desde 2013 tuvieron en manos la controversia bilateral entre Bolivia y Chile sobre el cautivo Litoral.

Bolivia le pidió a la CIJ que obligue a Chile a negociar de buena fe y en un tiempo razonable un acceso con soberanía a favor del país. En primera instancia Chile demandó a la Corte a declararse no competente sobre el tema, alegando que el Tratado de 1904 dejó establecidas las fronteras a perpetuidad y por tanto, no había ningún tema pendiente de resolución con Bolivia.

La Corte admitió la demanda boliviana y a partir de ahí es que siguieron los alegatos escritos y orales que terminaron en marzo con la presentación de ambos equipos de juristas, en el caso boliviano liderados por el expresidente y agente marítimo Eduardo Rodríguez Veltzé.

El investigador Víctor Hugo Chávez, en anterior entrevista con VISOR BOLIVIA, aclaraba que el único fallo favorable al país es que se incluya la palabra “obligación”, caso contrario, la demanda habrá sido una pérdida de esfuerzos, tiempo y recursos.

Chile se enfrasca en que ninguna corte en el mundo puede “obligar” a un país a negociar temas, menos que impliquen la cesión de su territorio.

A través de las redes, el abogado constitucionalista Williams Bascopé también hace referencia a la palabra soberanía, pues un fallo de la Corte de La Haya sin ese término le dará a Chile más tiempo para dilatar alguna solución al enclaustramiento boliviano.

La CIJ tomó la demanda en 2014, aceptó su competencia en septiembre de 2016 y concluyó de oír los alegatos en marzo de 2018 / WEB

“Que Chile se siente a negociar con Bolivia una salida, pero el Tribunal de La Haya no especifique el tiempo ni la soberanía, esto también sería posiblemente una derrota, porque Chile siempre nos dijo que quería el diálogo durante estos últimos 100 años, pero nunca para solucionar nuestro pedido de salida marítima”.

Ambos expertos jurídicos coincidieron por separado en aceptar que toda negociación conlleva ceder algo a cambio; es decir, Bolivia tendría que prepararse para entregar territorio, recursos naturales o compensaciones a cambio de un eventual corredor territorial.

Otra traba a corto plazo, después de lo que salga de La Haya, es que Chile interprete soberanía territorial, pero no soberanía marítima, algo que el Estado boliviano debió prever como estrategia, recordó el investigador Chávez.

En ese campo ingresa Perú, quien ya en 2014 logró un fallo de la misma CIJ para ampliar su mar territorial en una diagonal dibujada a su favor en costas del océano Pacífico.

Bolivia tendría que lograr una salida por otra zona o, caso contrario, convocar a Perú para llegar a un acuerdo de mar territorial o soberanía marítima en ese espacio recién ganado por el hermano país sobre 200 millas, que implican 20 mil kilómetros de costa.

Bolivia alegó durante todo el proceso, que Chile comprometió a través de los años, soluciones para el enclaustramiento con la caracerítica de "soberanía". Los avances diplomáticos de 1920 y el famoso abrazo de Charaña de 1975 son parte de los argumentos bolivianos. 

Con todo, Bolivia tendrá certidumbre, para bien o para mal, a partir de mañana en un tema que ha venido arrastrando desde la invasión chilena al departamento del Litoral en 1879.

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