MAS Y SUS MILITANTES, ENTRE OBLIGADOS Y REINSCRITOS AUTOMÁTICAMENTE

Un delegado del MAS condicionó el uso de una cancha a la inscripción de ciudadanos / RRSS

POLÍTICA | 28 Sep 2018

VISOR BOLIVIA / Redacción central.- El Movimiento Al Socialismo – MAS es el único partido político que hace meses va avanzando en la inscripción de militantes para revitalizar sus libros ante el Tribunal Supremo Electoral. Sin embargo, esta acción política conlleva desde obligaciones a funcionarios hasta inscripciones automáticas de sus primeros militantes fundadores, hoy en disidencia.

Las elecciones primarias serán el primer factor de medición del oficialismo que espera superar el millón de inscritos y apuntar a 3 millones de votos, considerando que logró poco más de 2,5 millones en el referendo constitucional del 21 de febrero de 2016, que el MAS perdió en su intento de habilitar a su binomio por medio de la modificación del art. 168 de la CPE.

Sin embargo, este proceso de inscripción de militantes conlleva denuncias sobre la obligación que circula en los ministerios y entidades estatales para que los funcionarios se adscriban al MAS bajo amenazas de despidos. Incluso, en algunos casos se ha solicitado inscribir hasta diez familiares y amigos con el “carnet azul”.

Fuentes que por razones obvias de posibles represalias en los despachos estatales, explicaron que son convocados antes de la hora de trabajo, 7 de la mañana, para recibir instrucciones de Recursos Humanos o de algún “invitado”, un operador político del MAS, que les reflexiona sobre “el compromiso con el proceso de cambio”.

“Nos dicen que no es obligación, pero que tenemos que ser consecuentes con el proceso y con nuestro trabajo”, dijo una persona a VISOR BOLIVIA.

Desde otro frente se denuncia que en las comunidades rurales incluso se está pidiendo “una firma” en los libros de inscripción a cambio del uso de los complejos deportivos inaugurados a lo largo de estos 12 años del régimen de Evo Morales.

Un caso se verificó a través de una filmación, distribuida en las redes sociales, en la comunidad de Puytucani de Potosí, donde un grupo de madres de familia solicitan el uso de la cancha y tinglado para sus hijos, pero un delegado masista les reprocha por no querer inscribirse a ese partido.

“La cancha es propiedad de la Alcaldía”, les dice el sujeto mientras las mujeres son amenazadas de ser echadas del lugar. “La cancha es del Estado, entonces danos el recibo de lo que hemos pagado; no hay que salir que nos eche llave, va a ser peor", reclaman.

El senador opositor Arturo Murillo también compartió una denuncia de otra comunidad en la que se está pidiendo a personas de la tercera edad a inscribirse al Mas, caso contrario, no serán beneficiados con la Renta Dignidad.

“Obligan a la población, hasta a las personas de tercera edad, a inscribirse al partido oficialista a con amenazas que no recibirán bono sol si no tienen carnet”, escribió el senador compartiendo una foto de un anciano con su carnet de militancia.

Finalmente, los registros de militantes del MAS mantienen las listas de los años anteriores a la asunción al mando de Morales Ayma.

Así lo denunció el disidente y exdiputado Filiberto Escalante al programa Encontrados de radio Líder FM.

Según expuso, este antiguo político orureño se inscribió al MAS en 2002 para la primera candidatura de Evo Morales y convenció a sus familiares y allegados a sumarse a ese “instrumento político” del cual no existían mayores aspiraciones.

A partir de 2009, Escalante comenzó a notar la irrupción de los cuadros “invitados” al MAS, que fueron desplazando a los fundadores y con la nueva CPE comenzaron a interpretar las leyes a su favor. Por ello, afirma, se declaró en la disidencia y fue reprochado por los oficialistas.

Hoy, ya fuera del MAS, Escalante verificó en los registros del Tribunal Departamental Electoral de Oruro que aún figura como militante, pero con la sigla MAS – IPSP, o Instrumento por la Soberanía de los Pueblos.

“Están reinscribiendo automáticamente, pero habemos muchos que ya no estamos con el MAS. Nos hemos inscrito en el MAS, pero no en el MAS – IPSP que desde 2010 está registrado así en el TSE”, declaró.

Para renunciar a la militancia, Escalante explica que existen dos vías, una carta al jefe del partido, en su caso Evo Morales, o una nota al TSE para lograr un certificado de no militancia que cuesta Bs 30. Mucha gente no realiza ese trámite y hoy todavía figura en listas del MAS, sin ser militantes, concluyó.

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