ARCHONDO REVELA HABER DADO CLASES DIPLOMÁTICAS A CANCILLER HUANACUNI

Archondo trabajó en NNUU durante tres años como representante alterno, un rango inferior a embajador

POLÍTICA | 17 Jul 2017

VISOR BOLIVIA / Redacción Central.- Rafael Archondo, otrora aliado del régimen y sobre quien pesa una acusación por “ejercicio irregular” de un cargo diplomático ejercido hace seis años considera que es víctima de una persecución política por “no callar” y reveló que fue docente de algunas autoridades de turno.

El periodista y docente universitario hoy radicado en México escribió una columna de opinión en el matutino La Razón titulado “Silencio calculado” en cuyos párrafos considera que fueron los eventos de Chaparina los que provocaron el distanciamiento con el régimen del Movimiento Al Socialismo (MAS) al haber escrito una crítica, pero cuatro años después de la represión a los indígenas.

“¿Cuándo me convertí en un enemigo?”, cuestiona y luego recuerda parte del texto excrito en octubre de 2015.

“En Chaparina, el Canciller tuvo el valor de decir que no fue secuestrado, gesto por el cual sufrió un periodo de injusto aislamiento. Respetuoso de la discrepancia, crítico del socialismo autoritario y desintoxicado de las mieles del poder, David presidente podría ser la enmienda oportuna que recomponga el evismo y lo convierta en simple y llano masismo. Como debe ser”.

Archondo recuerda que Sacha Llorenti, ministro de Gobierno durante la represión a los indígenas del Tipnis, ya aspiraba al cargo diplomático como embajador ante Naciones Unidas, algo que consiguió pese a la repulsa ciudadana que lo consideraba el operador de la violenta intervención policial de septiembre de 2011.

Asimismo, cuestionó el silencio del Gobierno en todos estos años, y recordó que incluso fue convocado a dar clases en la Academia Diplomática donde tuvo como alumnos al actual canciller Fernando Huanacuni y la exministra de Aguas y Medio Ambiente, Alexandra Moreira.

El último artículo de Archondo publicado en sentido contrario a los intereses del régimen se dio días antes del referendo constitucional del 21 de febrero de 2016 que le dijo no a la reforma del artículo sobre la reelección presidencial de Evo Morales.

“Somos los que pensamos que el principal problema del Movimiento Al Socialismo (MAS) es el caudillismo. Y es que, en sentido estricto, Bolivia no padece una dictadura, que sería la imposición de una voluntad particular mediante el uso de la fuerza. Lo que tenemos es un partido hegemónico que ha decidido errar, es decir, depender de una sola persona para subsistir”.

Junto a Archondo la acusación del Viceministerio de Transparencia del ministerio de Justicia se encuentra Pablo Solón, el activista ambientalista y aliado de Morales en la “guerra del agua” de Cochabamba, que antecedió el cago como embajador boliviano ante la ONU. El Gobierno cree que Solón “nombró” como sucesor a Archondo, pero este tenía un rango menor como “representante alterno”.

//@VisorBolviia / Foto Archivo Telesur//