UPEA MANTIENE PARO CÍVICO MIENTRAS RÉGIMEN Y ORGANIZACIONES ENTRAN EN CUARTO INTERMEDIO

El conflicto en El Alto paralizó esa urbe. Pedidos de destitución de Romero aumentan y éste tendrá que enfrentar querella penal

Estudiantes y docentes cortaron las vías de El Alto hacia La Paz / EL DEFENSOR SOCIAL

SOCIEDAD | 4 Jun 2018

VISOR BOLIVIA / Redacción Central.- El conflicto en la urbe alteña se mantiene luego del primer día de paro cívico. La Universidad Pública de El Alto – UPEA no dialogará con los ministros de Estado, mientras el régimen acude a sus organizaciones aliadas para instalar una mesa de negociación que entró en cuarto intermedio.

La ciudad de El Alto amaneció paralizada este lunes, acatando el paro cívico que fue convocado por la UPEA en coordinación con las dos Federaciones de Juntas Vecinales, una “contestataria” y otra “institucional”, y la Central Obrera Regional, estas últimas aliadas corporativas al régimen de Evo Morales.

Horas después, el ministro de la Presidencia, Alfredo Rada, convocó a esas dos dirigencias a ser parte de la mesa de diálogo en la Vicepresidencia. La Fejuve de Sandro Ramírez y la COR asistieron, pero no hubo ningún representante de la UPEA para validar el encuentro.

“Estoy seguro que la solución no se la va a encontrar bloqueando una avenida o enfrentándose a la Policía o perjudicando al normal desenvolvimiento de las actividades del pueblo alteño, la solución está en la mesa del diálogo”, dijo el funcionario al término de la reunión que entró en cuarto intermedio hasta mañana.

Ramírez, a su turno, dijo que “se consultará a las bases” si se mantienen las medidas de presión en respaldo a la UPEA y su pliego de modificación de la Ley 195 de Coparticipación Tributaria.

Ministros y dirigentes corporativos se reunieron sin la UPEA / ABI

Desde la UPEA se calificó la presencia de los dirigentes corporativos como una traición a El Alto, pues el paro cívico fue convocado de manera conjunta entre las llamadas “organizaciones vivas” de esta urbe, caracterizada por su férrea lucha sindical.

El docente Salvador Quispe, dijo a medios locales, que la UPEA continuará con el paro y luego tomará otras medidas de presión hasta lograr mayor presupuesto que saque a esa casa de estudios superiores del déficit con el que cerrará este semestre, bajo riesgo de cerrar actividades.

Hasta horas de la noche, los piquetes de huelga aumentaban y los bloqueos de acceso a La Paz se masificaban con la presencia de decenas de estudiantes, como se veía en la céntrica avenida 6 de Marzo.

Las demandas de la UPEA activaron marchas desde el año pasado. Sin embargo, el punto alto se dio el pasado 24 de mayo con el bloqueo de las vías en esa urbe, que provocó la represión policial y el saldo de un estudiante muerto, Jonathan Quispe Vila, de 20 años.

Las investigaciones contradictorias del régimen derivaron en la identificación del subteniente Cristian Casanova como presunto autor, al haber disparado su fusil antigases pero con una canica de fibra de vidrio adentro, impactando contra el pecho de Quispe, quien agonizó al menos seis minutos desangrándose en un pasillo a la vista de sus compañeros.

La Policía, según testimonio de los universitarios, no prestó ayuda a Quispe luego del disparo de Casanova. Es más, los motociclistas de la UTOP “se rieron” y dieron marcha atrás pese a las súplicas de atención.

En ese contexto, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, como cabeza de estos operativos de respuesta interna, fue acusado con una querella penal por la abogada de la Familia Quispe Vila, Paola Barriga.

Hoy, la abogada confirmó que el Ministro Público admitió la querella criminal contra Romero y adelantó que se ampliarán los delitos por asesinato, portación ilegal de armas y otros contra el mando policial.

Mientras, la UPEA continúa con las actividades paralizadas y el estado de emergencia. El pedido de renuncia de Romero pasó de esta universidad a los colectivos ciudadanos y comités cívicos como el de Potosí. El funcionario, empero, aseguró con total seguridad propia, en varias intervenciones públicas, que “yo no voy a renunciar”.

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