Cochabamba: Manfred quiere cambiar el sur y derriba el 25% de las ladrilleras

Foto agencias

SOCIEDAD | 9 Dic 2021

“Toda esta zona va a cambiar. Vamos a hacer vías estructurantes y toda esta zona va a tener una imagen totalmente diferente”

LOS TIEMPOS.- El alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, quiere cambiar la imagen de la zona sur. Por esta razón, ayer realizó la demolición de 11 ladrilleras, en el Distrito 5, en la OTB Lacma Cerro Blanco.

Los 11 hornos representan el 25 por ciento de las 43 ladrilleras que funcionan .

Asimismo, gestionó que volquetas de al menos seis sindicatos cooperen con la limpieza del entorno del río Tamborada para retirar los escombros que hay en la zona.

“En acuerdo con los ladrilleros, hemos comenzado con la demolición del 25 por ciento de los hornos. En marzo vamos a continuar con el otro 25 por ciento y luego hasta septiembre el 50 por ciento”, dijo Reyes Villa.

Añadió: “Toda esta zona va a cambiar. Miren la cantidad de escombros que hay; va a desaparecer. Vamos a hacer vías estructurantes hacia la terminal de buses (nueva), la Costanera del Sur. Toda esta zona va a tener una imagen totalmente diferente”.

La demolición de los 11 hornos comenzó a las 6:30 y concluyó a las 14:00. Inicialmente, se procedió con destrucción de 11 hornos, luego se desharán otros 11 y finalmente 21, hasta septiembre 2022.

La finalidad de estas demoliciones es bajar los niveles de contaminación del aire en Cochabamba, indicó el Alcalde.

Respecto al retiro de los escombros, el director de Medio Ambiente, Elvis Gutiérrez, manifestó que se retiraron incluso escombros de la sección hidráulica del río Tamborada, que representaba riesgo de desbordes en esta temporada.

“Se ha coordinado con la asociación de volqueteros para que nos apoyen con más de 150 volquetas para hacer esta limpieza del sector. El área de disposición de los escombros es en el botadero de K’ara K’ara, para que nuestra ciudad no se empiece a ensuciar, hay un sector asignado para estos escombros”, dijo Gutiérrez.

Protestas por la demolición

Tras la demolición de las primeras ladrilleras, un grupo de vecinos, que tenía esta actividad como única fuente de ingreso, protestó y exigió al Alcalde cooperación para conseguir un empleo.

“¿De qué vamos a vivir?, éste era mi único sustento. He pedido al Alcalde que me dé trabajo, aunque de barrendera, yo debo al banco. No creo que el horno contamine el medioambiente como lo hacen los combustibles”, dijo una afectada, Betty Sejas.

Otro afectado, Hernán Grágeda, contó: “Sabemos que el sector ladrillero no contamina como ellos dicen, ni el 2 por ciento contaminamos. Nosotros somos la tercera generación de ladrilleros, tenemos una antigüedad de un siglo y medio”. 

//FUENTE: LOS TIEMPOS//